Calcular Coeficiente de Gini
Finanzas y Economía

Coeficiente de Gini: ¿Qué es y cómo mide la desigualdad?

El índice de Gini, también conocido como el coeficiente de Gini, es uno de los indicadores más utilizados a nivel mundial para medir la desigualdad en la distribución del ingreso o la riqueza. Introducido por el estadístico italiano Corrado Gini en 1912, este índice se ha convertido en una herramienta clave para gobiernos, economistas y organismos internacionales que buscan evaluar la equidad económica en una sociedad.

¿Qué es el índice de Gini?

El índice de Gini es una medida estadística que refleja el grado de desigualdad en la distribución de ingresos dentro de una población. Su valor oscila entre 0 y 1, aunque a veces se multiplica por 100 para facilitar su interpretación en términos porcentuales. Por ejemplo, un índice de 0,276 equivale al 27,6 %. Un valor de 0 representa una igualdad perfecta, donde todos los individuos tienen el mismo ingreso, mientras que un valor de 1 indica una desigualdad total, es decir, donde una sola persona concentra todos los ingresos.
 

Por ejemplo, en Europa, según datos de Eurostat actualizados, los países con menor desigualdad —con índices de Gini entre el 21 % y el 25 %— son Eslovaquia (21,6 %), Eslovenia (23,4 %), Bélgica (24,2 %) y República Checa (24,4 %). En cambio, los niveles más altos de desigualdad dentro de la Unión Europea se registran en Bulgaria (37,2 %), Letonia (34,0 %) y Lituania (33,6 %). En el caso de España, el índice se situaba en el 31,2 % en 2024, siendo la media de la Unión Europea del 29,6 % (Eurostat).
 

El índice de Gini no solo se limita a los ingresos: también puede aplicarse a la riqueza, al consumo o incluso al acceso a la educación. Se utiliza tanto en estudios comparativos entre países como en análisis internos por regiones o grupos sociales. Por esta razón es uno de los indicadores cuyo uso se aprende en un Máster en Dirección Financiera o Máster en Finanzas.
 

Fórmula del Índice de Gini: explicación y aplicación

Existen varias formas de calcular el índice de Gini, pero todas comparten un principio común: comparar la distribución observada con una distribución perfectamente equitativa.


Fórmula clásica:

Una de las fórmulas más conocidas es la siguiente:
G = 1 - Σ (Yi + Yi-1) × (Xi - Xi-1)
Donde:

  • Xi son las proporciones acumuladas de la población (ordenadas de menor a mayor ingreso).
  • Yi son las proporciones acumuladas del ingreso.
  • Σ indica una sumatoria sobre todas las clases.

Esta fórmula se basa en la curva de Lorenz, una representación gráfica que muestra qué porcentaje del ingreso total acumula cada porcentaje de la población. Cuanto más se aleja la curva de la línea de igualdad (la diagonal perfecta), mayor es la desigualdad.


Índice de Gini ponderado:

En contextos donde se quiere dar más peso a ciertas unidades (por ejemplo, familias más numerosas), se puede usar el índice de Gini ponderado. Este incorpora una variable de peso (como el número de personas por hogar) para reflejar con mayor precisión la distribución real. Es especialmente útil en estudios de política pública y redistribución fiscal. Por ejemplo, si se aplica este índice a dos regiones con idéntica desigualdad en los ingresos, pero una tiene hogares más grandes o más niños, el índice ponderado ofrecerá un resultado más ajustado a la realidad.

Imagen
Coeficiente de Gini

¿Cómo calcular el Índice de Gini paso a paso?

A pesar de que el cálculo del índice puede parecer complejo, se puede descomponer en una serie de pasos relativamente simples. Veámoslo en detalle:

  1. Ordenar la población por nivel de ingreso, desde el más bajo al más alto.
  2. Calcular las frecuencias relativas (pi): número de personas en cada clase dividido por el total de la población.
  3. Determinar los ingresos relativos (qi): ingreso de cada clase dividido por el ingreso total.
  4. Acumular los valores anteriores, obteniendo las distribuciones acumuladas Pi y Qi.
  5. Trazar la curva de Lorenz, representando los puntos (Pi, Qi) en un gráfico.
  6. Calcular el área entre la línea de igualdad y la curva de Lorenz. Esta área representa la desigualdad y se usa para obtener el coeficiente de Gini mediante el cociente:
    G = A / (A + B)
    Donde A es el área entre la línea de igualdad y la curva de Lorenz, y B es el área bajo la curva.

En Excel o SPSS no existe un comando automático para calcularlo, pero se puede construir utilizando fórmulas como las que acabamos de ver.


Ejemplo práctico:
Supongamos que en una muestra de 100 personas, las 10 más pobres ganan solo el 1 % del ingreso total y las 10 más ricas concentran el 40 %. Trazando los datos acumulados y aplicando la fórmula del área, obtendremos un índice de Gini cercano a 0,45, indicando una desigualdad media-alta.

¿Cómo se relaciona la brecha salarial con el índice de Gini?

La brecha salarial —la diferencia entre los ingresos de distintos grupos dentro del mercado laboral— tiene un impacto directo en el índice de Gini. Cuanto mayor es la disparidad entre los salarios altos y bajos, mayor será el valor del índice, reflejando una sociedad más desigual.
Por ejemplo, si en un país los directivos ganan 15 veces más que los trabajadores de base, mientras que en otro la diferencia es solo de 5 veces, es probable que el primer país tenga un índice de Gini más alto.


Desigualdad de género:

La brecha salarial de género también influye. Según la Comisión Europea las mujeres en la UE ganaban en promedio un 13 % menos que los hombres por hora trabajada. En países donde esta diferencia es mayor, el índice de Gini tenderá a ser más alto, a menos que existan políticas fiscales y sociales que compensen esta desigualdad.


El papel de los impuestos y transferencias:

El índice de Gini puede calcularse antes y después de impuestos y transferencias. Por ejemplo, en países nórdicos como Suecia, el índice de Gini bruto (antes de impuestos) puede ser similar al de otros países europeos, pero el índice neto (después de transferencias) es mucho menor gracias a un sistema fiscal redistributivo. Esto demuestra que no solo importa cuánto gana la gente, sino también cómo se redistribuyen esos ingresos a través de las políticas públicas.
El coeficiente de Gini es una herramienta fundamental para entender cómo se reparte la riqueza o el ingreso en una sociedad. Su valor aporta una visión sintética y comparativa de la desigualdad, aunque no exenta de limitaciones. Si bien no ofrece respuestas sobre las causas profundas ni prescribe soluciones, sí permite medir el impacto de políticas redistributivas, cambios económicos y tendencias sociales. En tiempos de crisis económica, inflación o crecimiento desigual, entender y monitorear este indicador es más importante que nunca.

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